De nubes en la Biblia
“ La declaración formal contra Egipto: ¡Miren! Jehová va montado en una nube veloz y entra en Egipto. Y los dioses de Egipto que nada valen, ciertamente se estremecerán a causa de él...” ( Is 19.1 )
“ ¡Mira! El nombre de Jehová viene de lejos, ardiendo con su cólera y con nubes pesadas...” ( Is 30.27 )
“ ... y verán al hijo del hombre viniendo sobre las nubes del cielo con poder y gran gloria.” ( Mt 24.30 )
Comenzamos viendo tres características de las nubes que utiliza Hashem como vehículos: son veloces, pesadas y tienen poder y gran gloria.
Desde Exodo podemos hacer un seguimiento de ellas.
“ Y Jehová iba delante de ellos durante el día en una columna de nube para guiarlos por el camino, y durante la noche en una columna de fuego para darles luz, para ir de día y de noche.
La columna de nube no se alejaba de delante del pueblo durante el día, ni la columna de fuego durante la noche.” ( Ex 13.21,22 )
Una nube guió permanentemente a Israel durante cuarenta años a través del desierto, en las noches se encendía como “columna de fuego” para iluminarlos.
“ Entonces el ángel del Dios verdadero que iba delante del campamento de Israel partió y se puso detrás de ellos y la columna de nube partió de la vanguardia de ellos y se situó detrás de ellos.” ( Ex 14.19 )
La Palabra manifiesta que esta nube estaba dirigida por un ángel. O lo que es igual: la nube se trasladaba con el ángel.
“ De manera que se introdujo entre el campamento de los egipcios y el campamento de Israel. Por una parte resultaba ser una nube junto con oscuridad. Por otra parte seguía alumbrando la noche. Y este grupo no se acercó a aquel grupo durante toda la noche. ” ( Ex 14.20 )
“ Y durante la vigilia matutina aconteció que Jehová empezó a mirar hacia el campamento de los egipcios desde dentro de la columna de fuego y nube, y empezó a poner en confusión el campamento de los egipcios. Y siguió quitándole ruedas a sus carros, de modo que los conducían con dificultad, y los egipcios comenzaron a decir: Huyamos de todo contacto con Israel, porque Jehová ciertamente pelea por ellos contra los egipcios.” ( Ex 14.24,25 )
La capacidad de maniobra que se muestra de la nube le permitió hacer desplazamientos exactos, y además desde su interior el ángel de Jehová interviene contra los egipcios y protege a su pueblo.
“ ... iba delante de ustedes en el camino a fin de espiar para ustedes un lugar donde acampar, por fuego de noche para que vieran por qué camino tenían que andar, y por una nube de día.” ( Dt 1.33 )
Sin embargo la nube no es exactamente el vehículo del ángel, según veremos a continuación.
“ Entonces ocurrió que tan pronto como hubo hablado Aarón a la entera asamblea de los hijos de Israel, ellos se volvieron y dirigieron sus rostros hacia el desierto, y ¡Mire!, la gloria de Jehová apareció en la nube.” ( Ex 16.10 )
“ Y a los ojos de los hijos de Israel la vista de la gloria de Jehová era como un fuego devorador en la cima de la montaña.” ( Ex 24.17 )
Dentro de la nube estaba la “gloria de Jehová” y esta gloria más que fuego era un resplandor, porque leemos al final del Exodo:
“ Y la nube empezó a cubrir la tienda de la reunión, y la gloria de Jehová llenaba el tabernáculo.” ( Ex 40.34 )
La gloria aquí descrita es el resplandor producido por el carro del ángel, el mismo resplandor que dentro de la nube parecía fuego.
Los Salmos también indican que las nubes no son propiamente el vehículo de los ángeles de Hashem. Las nubes son las que ocultan el resplandor o la gloria del carro guiado por los ángeles.
“ Inclinó los cielos, y descendió; y había densas tinieblas debajo de sus pies. Cabalgó sobre un querubin. Y voló; voló sobre las alas del viento. Puso tinieblas por su escondedero, por cortina suya alrededor de sí; oscuridad de aguas, nubes de los cielos.
Por el resplandor de su presencia, sus nubes pasaron...”
( Sl 18.9-12)
“ El extendió una nube por pantalla, y fuego para alumbrar de noche.” ( Sl 105.39 )
Si nos hacemos la pregunta establecida en Isaías 60, tenemos la respuesta.
“ Quienes son estos que vienen volando justamente como una nube, y como palomas a los agujeros de su palomar?” ( Is 60.8 )
Estas naves viajan con viento tempestuoso y son dirigidas por querubines. Junto al río Kebar Ezequiel fue testigo:
“ Y empecé a ver, y ¡Mire!, había un viento tempestuoso que venía del norte, una gran masa de nube y fuego trémulo y tenía un resplandor todo alrededor, y de en medio de él había algo como la apariencia del electro, de en medio del fuego.
Y en medio de él había la semejanza de cuatro criaturas vivientes, y esto es lo que parecían: tenían la semejanza del hombre terrestre.” ( Ez 1.4,5 )
“ Esta es la criatura viviente que yo había visto bajo el Dios de Israel junto al río Kebar, de modo que llegué a saber que eran querubines.” ( Ez 10.20 )
Y como nubes siguen apareciendo las naves en las Escrituras del Nuevo Pacto.
“ Y después que hubo dicho estas cosas, estando ellos mirando, fue elevado, y una nube se lo llevó de la vista de ellos.” ( Hch 1.19 )
“ Después nosotros los vivientes, que sobrevivamos seremos arrebatados, juntamente con ellos ( los muertos en Dios ), en nubes al encuentro del señor en el aire...” ( 1Tes 4.17 )
“ Y oyeron una voz fuerte procedente del cielo decirles: Suban acá. Y subieron al cielo en la nube...” ( Ap 11.12 )
Jesús les contó a los discípulos por qué tenía que irse al cielo. Era porque así el podría enviar al Espíritu Santo para que estuviese con sus seguidores. Fue predicho en la Biblia años atrás que Jesús ascendería a los cielos en Salmo 68:18 Subiste a lo alto, cautivaste la cautividad. Incluso Jesús dijo que ascendería pronto después de resucitar de la tumba (Juan 20:17). Así que Jesús se paró sobre Mt. Olivet un pequeño camino desde Jerusalén y les dijo a los discípulos que esperen la promesa del Padre (Actos 1:4), o que esperaran en Jerusalén hasta que él enviara su Espíritu para darles el poder de predicar el evangelio.
Luego se formó una nube alrededor de Jesús y ¡comenzó a flotar en el aire sobre esta! Lentamente se elevó más y más alto hasta que desapareció de su vista. ¡Wow! Luego dos ángeles aparecieron al lado de los discípulos y les dijeron que un día Jesús volvería de la misma manera en que se había ido. La próxima semana aprenderemos que sucedió diez días después en Pentecostés.
Segun dicen Elohim es el plural de EL para referirse a muchos dioses o bien extraterrestres y Hashem es Ya Shem el nombre que los anunakis le daban a su nave.
sábado, 15 de agosto de 2009
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